jueves, 23 de diciembre de 2010

FELIZ NAVIDAD 2010

Amigos y hermanos en el Señor, estamos ya muy próximos a la Navidad y va a cumplirse en su totalidad la profecía del profeta Isaías “Una Virgen concebirá y dará a luz un Hijo, y se llamará Emmanuel, que significa Dios con nosotros” Nuevamente, escucharemos el canto de los ángeles “Gloria a Dios en lo alto del cielo y paz en la tierra a los hombres que él ama.”
En la liturgia de estos días, recordamos el acto supremo de amor de nuestro Señor Jesucristo, que se hace nuestro hermano para acompañarnos cada día en nuestras tristezas y gozos “entra en nuestra historia para que nosotros podamos entrar en la historia de Dios; entra en el tiempo, para que nosotros podamos abrirnos a la eternidad”

Hermanas y hermanos. La Navidad y los últimos días del año, son un buen momento para aprender de los errores y comenzar de nuevo en nuestras vidas, para ser santos. Momentos para la reflexión y caridad para con los hermanos. Abramos nuestro corazón al Dios Niño. Que el ejemplo de Santa María nuestra Madre, San José nuestro Padre y Señor, reconforten con su intercesión nuestra vocación y seamos cada día, verdaderos Discípulos y Misioneros de Jesucristo.
Les envío a todos una felicitación cordial y fraterna por la Natividad de nuestro Señor Jesucristo. Que estas fiestas sean de paz y amistad, un fuerte abrazo a la distancia, prometo encomendarlos a todos en las eucaristías que presida en mi primera navidad como sacerdote. La paz de Cristo esté con todos.
Atentamente,

P. Alejandro García